El Reino de Monelle

"No hemos sembrado nada que no esté devastado". Todo está roto, Paul Eluard. Sublinfernal Autodestrucción, mutilación, desgaste. ¿Cuántos soles se han extinguido? La música desaparece, las letras se derriten, y ya no puedo (pero ni un poquito) poner mi mente en blanco. Ahora, atravesando la eterna noche  en puntas de pie. Las lágrimas recuerdan el veneno y la tragedia de los amantes shakesperianos. Egon Schiele.

↝Anómalo segundo: La visita de Gacy Sólo le quedaban cinco horas antes de rendir. Cambiaba de posición cada minuto buscando la más cómoda para lograr dormirse, pero no podía. Normalmente inventar historias dramáticas sobre su futura vida funcionaba para relajarse, pero no esta vez. Le costaba imaginar su propio rostro, pronto se perdía entre los dientes manchados de nicotina del profesor Oscar (¡el hijo de puta de Oscar!) o sus propias manos temblando al hablar. Los nervios volvían y el sueño huía. Cada mañana se despertaba a las siete, desayunaba un café aguado, salía corriendo para no llegar tarde al trabajo, se tomaba el colectivo abarrotado de gente y aromas pestilentes, pagaba un boleto exorbitante, escuchaba reproches, atendía el teléfono, llenaba formularios y cumplía al pie de la letra cada estúpido requisito que le exigía su jefe. Todas esas cosas juntas hacían con ella un juego tétrico de desgaste emocional, sobre todo en esa semana, porque debía prepararse par

"Libértame de mi. Quiero salir de mi alma". Llénate de mi, Pablo Neruda. Ciervo vulnerado ¿Qué has visto en tu mente que tus ojos no han observado? Huye. Huye como siempre del constante recuerdo, y del miedo porque tienes miedo, y tiemblas bajo la piel curtida, y lloras detrás de esos ojos ausentes. Gacela triste, Vulnerable. Se quiebra una rama en tu oscuro y profundo bosque Y volvés a huir. Para vivir corriendo Para morir huyendo.  Emilia Mondragón.

" Y el porvenir, m i única esperanza es mi tumba i gual a la tuya, r odeada de un mundo indiferente ". Mi muerta viva ,  Paul Eluard. Alison Scarpulla. Resurrección ¿Por qué vas juntando dolores en las calles? Huracanes, sangre, la piel de un muerto, manos de tijeras, bocas de lobos, héroes sin ningún poder. Todo vuelve más pesada la cruz y hace lento tu caminar. Volvés a herirte una y otra vez. Y no olvidas ni sanás. (No podés) Querés aferrarlo todo, que nada se pierda para que no haya más ausencias en tu memoria y el sufrimiento te haga fuerte. ¡Dejalos ir! De tanto odiar la muerte ya no podés vivir sin ella. Te persigue a donde vayas y te recuerda que no sueltes esas agonías. En realidad,  es tu voz que la llama y son tus lágrimas las que la traen de regreso, porque una vez temiste ya no ver los ojos de esa víctima y fuiste quien falleció ese día. No hay más cura para este tormento, no hay re

↝ Anómalo primero : Antes del origen Lucía camina por las calles de Rosario, un 21 de Enero de 2013. El calor del verano sube por los tobillos y baja por su frente en forma de gota de sudor. Va despacio, a su lado pasan hombres de traje y algunas mujeres con niños caprichosos que no se bancan el calor. Ve frente a McDonald's una banda haciendo jazz y un poco más allá a un chico tocando la guitarra. Busca en su bolsillo derecho unas monedas, las acaricia, dibuja su contorno y luego se las deja en la pequeña cajita de cartón. Continúa caminando medio arrepentida de haber salido ese día y a esa hora. Todo comienza a molestarla, el calor, la mujer que grita “chiiiipacitos”, los adolescentes que la chocan. Hasta que ve, al fin, el gran cartel de pintura desgastada que anuncia su oasis: la librería. Entra y atraviesa la sección de “Política”, la saludan Perón, Cristina, De la Rúa, Obama ¡y la puta que los parió a todos! Los ignora y continúa. Cruza indiferente por “Filosofí

"Subiré al cielo, le pondré gatillo a la luna y desde arriba fusilaré al mundo, suavemente, para que esto cambie de una vez". La luna con gatillo, Raúl González Tuñón. Zdzisław  Beksínski. Quimera ¿Liberará la poesía este remordimiento? ¿Tendrá la fuerza suficiente para destruir a alguien y la magnitud exacta para luego reconstruirlo? ¿Aliviará el alma o desatará tempestades? ¿Podría ser el todo de un cielo infinito? ¿la melancolía de la lluvia cuando todo arde? ¿Liberará las palabras atrapadas en mi boca? ¿las oscuridades que me atropellan? ¿Podría ser la salida de este laberinto? ¿el vuelo eterno que me salve? ¿Liberará la poesía a los muertos que no quieren morir? ¿a los vivos que no quieren resucitar? ¿Podrá ser la ira de mis puños cuando todo parece perdido? ¿Liberará la escritura todo este dolor de sentirme un espejo roto y, en sus veinte mil retazos, el reflejo de un niño con orugas muertas en sus manos?

"Recuerda que no puede haber nobles palabras ni gobierno justo mientras algunos vivan excluidos de la justicia". Espartaco, Arthur Koestler. Ocaso ¿Cuándo fue que crecí de golpe? ¿Cuándo desaparecieron las utopías? Que triste es mirar todo decepcionada, Que trágico es ver las mariposas hechas fuego.

Y así, sin más miedos, doy comienzo a esto.  “Aquí yace un pájaro. Una flor. Un violín”.  Epitafio, Juan Gelman. Extravío   Fumabas en la oscuridad, inquietante, algo hiriente. El humo salía de tus labios y dibujaba recuerdos. Un conejo, una niña, un pozo. Y caías en una lágrima por un eterno delirio. Eras frágil, podías hacerte miles de pedazos. Y eso pasó.   Pero regresaste, tenías muchas vidas por sufrir. Fumabas en la oscuridad, dibujabas, caías. Eras lágrima,  eras fénix. ¿Tan blancos estaban tus ojos que no sabías quién eras? Dorada. Tenías el sol en tu cuerpo y la noche oscura en tu cabeza. Fuego y humo, pensabas, peleabas y resistías.   El mundo nos arrastra a perdiciones porque seguimos a los que nunca se encontraron. Helmut Newton.